Los forrajes palentinos intentan dar el salto a Asia a través de China
Noticia del DIARIO PALENTINO, 21-8-2012
China ha puesto sus ojos en los forrajes
españoles, que es lo mismo que decir que se ha fijado en Palencia.
El principal mercado asiático no quiere depender
exclusivamente de los Estados Unidos -su principal suministrador-, y ha
auditado, a través de la Administración General de Supervisión de Calidad,
Inspección y Cuarentena de la República Popular de China (Aqsiq) una treintena
de instalaciones del territorio nacional que, meses atrás, mostraron interés
por iniciar su aventura en el mercado chino. China precisa importar alfalfa por
valor de casi 400 millones de euros, un pastel muy apetecible.
En la provincia existen cinco grandes
deshidratadoras de alfalfa que prevén trabajar esta campaña sobre 134.000
toneladas. La superficie palentina dedicada a estos cultivos herbáceos, a fecha
de diciembre de 2011, era de 54.166 hectáreas. Con estos datos en la mano,
Palencia es la provincia castellanoleonesa que mayor producción y superficie
dedica a los cultivos herbáceos, especialmente a la alfalfa y la veza
forrajera. No es de extrañar por tanto que la delegación del Ministerio de
Agricultura de China que ha visitado España días atrás se haya detenido en
varias instalaciones -tres en concreto-, de la provincia palentina,
especializadas en la producción de forraje desecado. «La impresión general, a
expensas del informe que redacten es bastante positiva», precisó ayer Joaquín
Capistrós.
El máximo responsable de la Asociación
Española de Fabricantes de Alfalfa Deshidratada (AEFA), reconoció que el
mercado chino es «muy exigente», y que por tanto, esta visita ha de enmarcarse
en el proceso necesario para homologar un producto y que éste pueda ser
exportado con todas las garantías.
A favor. «El hecho de que en España la
alfalfa se deshidrate, ya que es una práctica que no se hace en casi ningún
país del mundo, es algo que juega a nuestro favor», reseñó ayer Capistrós. El
proceso que los auditores chinos de la Administración General de Supervisión de
Calidad, Inspección y Cuarentena pudieron comprobar en las instalaciones
palentinas «aporta muchas ventajas», principalmente en materia sanitaria «ya
que se estabiliza el producto, es más homogéneo y sanitariamente tiene muchas
más garantías de llegar en perfecto estado». Un aspecto en el que los auditores
hicieron especial hincapié fue en el tiempo que transcurre entre la
deshidratación del forraje y el posterior envío de la mercancía. «Estamos
hablando de que ellos quieren absoluta garantía de que el producto, desde que
sale de la planta, hasta que llega a su destino, no sufre problema alguno, no
se alteran sus propiedades», precisó Capistrós. En el caso de que se supere
esta fase, las autoridades chinas autorizarían a empresas a poder exportar
alfalfa deshidratada a China, aspecto en el que están interesadas, ya que a
fecha actual EEUU es su único proveedor.
«Quieren abrir mercado y nosotros
también. Ahora mismo se puede decir que solo Estados Unidos les abastece con
los parámetros que exigen. Ahí es donde entran en juego las plantas españolas»,
apuntó el máximo responsable de la asociación nacional que agrupa a las
empresas deshidratadoras de forraje españolas.
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